Una nueva cara en la señalización de la comuna tiene desde hace unos días Pumanque, con la instalación de información tallada en roble y coihue, que da un nuevo aire a quien vive y visita esta tierra.

El cambio impulsado por el alcalde Gonzalo Baraona Bezanilla, busca que los dos sectores urbanos, como es Pumanque centro y Nilahue Cornejo, no pierdan la identidad de pueblo de campo y haya una concordancia entre la construcción y la información de calles y números que está instalada.

Según comentó el edil, la idea nació cuando comenzaron a reconstruirse los corredores patrimoniales. Así se postuló a un proyecto Subdere, quien financió la obra y de paso, da una cara más amable a la comuna.

“Contar una historia a través de lo visual, generar un sello identitario y que las nuevas y viejas construcciones de Pumanque “conversen” con la nueva información de calles y numeración escritas en madera de roble y coihue suma, sin duda, a esta una nueva identidad pumanquina que estamos impulsando desde el municipio”, dijo la autoridad.

Agregó el alcalde que “éstas señaléticas concretan uno de mis propósitos, como es construir una comuna amigable visualmente y respetuosa de su pasado, donde la madera, los techos de tejas y casas de barro se unen a la usanza que tenía esta noble tierra del valle de Colchagua en décadas pasadas”.